Comitiva regional viajará a Antofagasta para conocer experiencia de plantas desaladoras

Hasta la región de Antofagasta asistirán autoridades de la región de Coquimbo para conocer el funcionamiento y consecuencias que conlleva la instalación de plantas desaladoras. Esto debido a la compleja situación hídrica presenta por más de 10 años en la zona, la que ha complicado tanto a agricultores como también ha comprometido el agua para el consumo humano en las provincias de Limarí y Choapa.

Desde el año 2003 que esta planta desaladora abastece en un 85% la demandan hídrica de Antofagasta, en un 100% la de Mejillones y en su totalidad desde el año 2020 a los 23 mil habitantes de Tocopilla.

El Delegado Presidencial, Rubén Quezada, indicó que se están evaluando las posibilidades de plantas desaladoras en la región, pero de forma que no tenga perjuicio en el medioambiente.

“Tenemos que explorar alternativas para dar solución a la problemática y el presidente ha sido claro respecto a la opción de uso de desaladoras cuando estas no afecten al medioambiente. Acompañaremos a una comitiva para saber como ha sido la experiencia en otras regiones, para saber como podemos acelerar el proceso de toma de decisión de esta materia y poder enfrentar la escasez con la mayor celeridad posible”.

Víctor Pino, Diputado por la región de Coquimbo, participará de esta visita a la región de Antofagasta para conocer el funcionamiento de la desaladora. Pino, comentó que la situación hídrica en la zona es crítica y que se está llegando una década tarde a la emergencia.

“Tenemos una sequía que golpea duro hace 12 años, porque las fuentes de cordillera y subterráneas no están recibiendo suficiente recurso para solventa las necesidades de los sectores, del consumo humano, se habla de racionamiento para la conurbación. Mirar estas desaladoras es fundamental, pero se llega 10 años tardes, de ser así no estaríamos hablando de racionamiento”.

En la región, hay algunos proyectos que están en etapa de desarrollo, para implementar una planta desaladora. El “Proyecto Azul”, buscaría mediante osmosis inversa, ejecutar una planta que suministre 600 litros por segundo para el 2026 con opción de duplicar esa cantidad para 2030. Así lo indicó Joan Leal, Gerente General del proyecto Azul.

“En su primera etapa este proyecto considera una desalinizadora que considera agua para el consumo humano a partir del uso de agua de mar y energías renovables con una capacidad inicial de 600 litros por segundo. Azul, estaría en El Panul al sur de Coquimbo, se encuentra en etapa de desarrollo en fase de estudios técnicos, económicos y ambientales”.

Marcela Salas Salazar