( Inf: María José Ayancán)
En horas de esta mañana el Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA entregó los resultados del programa que redujo el uso de plaguicidas en la producción de frutas y hortalizas, entre productores de La Serena, Monte Patria y Coquimbo. Esto fue posible gracias a la utilización de insectos, manejo de plagas, trampas cromáticas y mallas.
Claudio Salas Director del INIA señaló que el programa se puso en práctica el año 2017, para eso trabajaron con un grupo de agricultores y “en el transcurso de tres años logramos reducir el uso de plaguicidas en un 80% para el caso del tomate y un 40% en las lechugas”.
La escasez hídrica, la desertificación, la contaminación y cambios en la estructura etaria de la población fueron las razones por las que se desarrolló el programa.
“Cada vez es más común que hayan casas cerca de los campos agrícolas, por lo tanto existe mayor riesgo de intoxicaciones agudas por plaguicidas, por lo tanto si uno comienza a trabajar en la temática de la agroecología o del equilibrio natural de la biodiversidad se reduce el uso de plaguicidas lo que ayudaría a no tener casos de intoxicaciones agudas” comentó Salas.
De esta manera los cambios no solo favorecen a los agricultores sino también a los consumidores, ya que actualmente en Chile se ha evidenciado el uso de plaguicidas en hortalizas, de esta forma se pretende que no hayan problemas de salud en la población.
En la región de Coquimbo cerca de un 50% de los productores de hortalizas aplican el manejo integrado de plagas, lo que se debería a la falta de un agente que favorece los procesos de desarrollo rural e incentivos, y el nivel educacional de los agricultores, según las encuestas realizadas en la Región que más del 50% de los agricultores poseen educación básica y menos del 15% tienen educación técnica.