Seis son las familias del Olivar Bajo, que tras tres meses de trabajo y espera, recibieron nuevamente sus viviendas, las cuales contemplaron recambio completo de segundos pisos y de sistema eléctrico, ampliación, instalación de piso flotante y cambio de sistemas de aislación térmica y acústica.
Quien fue la encargada de reunir a sus vecinos de calle Boston para postular a las mejoras, fue Magaly Bonilla quien emocionada al recibir sus llaves comentó, “nos han dado la oportunidad, son sueños que uno no puede alcanzar y la mejora de una vivienda para nosotros igual es muy importante, el barrio se nos ha mejorado bastante porque nos arreglaron las dos corridas”.
Su vecino Héctor Mundaca se mostró impactado con el cambio, “verla como era y como está ahora sin duda es tan dándonos un envión para seguir arreglándolo de tal manera, que por lo menos que imite lo que está hecho ahí arriba, que es de muy buena terminación, los detalles, muy preocupado de eso entonces muy agradecido, se notó que pasó una mano profesional por ahí y eso nos alegra mucho”, además agregó, “muy agradecido, agradecido con el alcalde por las gestiones municipales, por la constructora y por la municipalidad que siempre ha estado al lado de nosotros y eso se agradece”.
A su vez y compartiendo esa emoción, el director de Desarrollo Comunitario, Cristóbal Reyes destacó la importancia de contar con estos recursos para la vivienda, que van en directo beneficio de las familias, “estamos muy contentos de compartir esa alegría, devolver la dignidad a la familia coquimbana y sobre todo que esos recursos apalancados por nuestro departamento de Vivienda finalmente decanten en el bienestar de los habitantes de nuestra comuna”, señaló.
INICIATIVA MUNICIPAL
A fines de la década de los 80 y a principios de los 90, fueron entregadas estas viviendas sociales de 45,05 metros cuadrados, las que en sus más de 30 años de construcción comenzaron a presentar problemas de insalubridad y seguridad por la aparición de plagas de termitas. Esto llevó al municipio de Coquimbo a través del Departamento de Vivienda a impulsar desde el año 2011 un programa que permitiera entregar la tan anhelada solución habitacional.
César Cornejo, arquitecto encargado de la oficina de Vivienda Usada del departamento municipal señaló, “lo más satisfactorio de esto es la dignidad que nosotros devolvemos, estos proyectos son casas que se están prácticamente cayendo, por lo tanto, nuestro trabajo y desafío es poder reparar y entregarles una solución prácticamente nueva”.
De esa misma manera lo expresa Graciela Castillo, también beneficiaria, “son gigantes los dormitorios, son tres dormitorios equipados hermosos, buenas terminaciones, lindo el piso, todo hermoso y estamos muy felices”.
El monto del subsidio Serviu corresponde a 300 UF para restauración de cada vivienda y donde el beneficiario debe aportar sólo con un ahorro de 10 UF. El proyecto es presentado por el municipio de Coquimbo junto a los vecinos a la entidad gubernamental.
Consultada por el programa Magaly Bonilla comentó, “junté a los vecinos para la documentación y después fuimos al departamento de la Vivienda de la DIDECO y ahí empezamos a participar de las casas polillas. Sin este proyecto no hubiésemos podido arreglar nuestras casas”.
Una opinión similar entrega Graciela, “valió la pena, porque al final son recursos que de a poco se van juntando, pero ganarse el subsidio es algo impagable porque ya las casas estaban muy deterioradas por el tiempo entonces llegó justo en el momento preciso”.
En cifras desde el año pasado hasta la fecha y a través del departamento de Vivienda se han realizado alrededor de 1.500 soluciones habitacionales, algo que destaca Reyes, “la política comunal de vivienda no cabe ninguna duda que es una de las preocupaciones más importantes que ha tenido la administración de nuestro alcalde Ali Manouchehri, hemos conseguido avanzar sustantivamente en la adquisición de dos terrenos importantes para poder emplazar proyectos que devuelvan la dignidad a miles de personas que hoy día lamentablemente no cuentan con una solución habitacional y no sólo eso, hemos focalizado muchos esfuerzos en los subsidios de mejoramiento como por ejemplo la ampliación, cambios de techo y otros más”.
Hasta la fecha, el programa de mejoramiento de segundos pisos ya contempla la realización de más de 230 soluciones en la comuna para este 2023, de las cuales 170 corresponden a la localidad de Tierras Blancas.