Nosotros ya no dormimos tranquilos, la gente del sector nos amenaza con la quema de nuestras casas, nosotros no tenemos dónde mas vivir, no hay luz ni agua y básicamente comemos tierra”, así describe las condiciones en las que vive Andrés y 30 familias más del sector.
A causa de las precarias condiciones en las que viven los residentes de la toma en Huachalalume (quienes llegaron hace 6 meses producto de la pandemia) es que, en la mañana del viernes 16 de octubre llegaron protestando al centro de La Serena con el fin de que sus exigencias sean escuchadas por las autoridades de la región. Jorge quien forma parte de la toma expresa que “necesitamos que nos escuchen, somos ciudadanos chilenos y vivimos bajo la misma Constitución, tenemos todos los mismos derechos”.
Las respuestas no se hicieron esperara ya que el alcalde de la Municipalidad de La Serena, Roberto Jacob los recibió, escuchando las demandas de los locatarios, el edil, luego de la reunión señaló que “vamos a hacer el esfuerzo de poner agua ya que desde la contraparte de la toma no le dan”, afirmando que “ese es un problema interno que tienen”.
Asimismo, Jacob indica que “me pidieron ayudas sociales y me pidieron un ministro de fe porque ellos quieren realizar un comité de vivienda, les dije que sí, que me avisaran cuándo y nosotros le facilitábamos uno”. El alcalde les recalcó que “donde no podemos meternos es en la autorización de los terrenos, eso se tiene que ver con Bienes Nacionales o con el Intendente”.
Mientras tanto, las otras 60 familias que esperan que se concrete el proyecto habitacional no está de acuerdo con la presencia de nuevos residentes, así lo explicó el vocero Matías Martínez.
Martínez comenta que “ellos aluden a cosas que no son reales, por ejemplo, que no tienen donde vivir, que no poseen servicios básicos, pero si uno va al sector se dará cuenta que tienen mucha capacidad para construir casas, tener autos y además se cuelgan el alumbrado público”.
“La municipalidad entrega agua y nosotros en el APR también entregamos agua, pero a las familias que están autorizadas a estar ahí, ya que el resto de personas son ajenas que han llegado los últimos 6 meses”, concluyó el vocero de esta comunidad.