Lluvias permitieron aliviar estrechez hídrica, pero continúa sequía que se extiende por 15 años

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A pesar de la prolongada sequía que afecta a la Región de Coquimbo, las autoridades han destacado cifras positivas en cuanto a la disponibilidad de agua para el período entre septiembre de 2024 y marzo de 2025. En una conferencia de prensa, la ministra de Obras Públicas, Jessica López, junto al director general de Aguas, Rodrigo Sanhueza, y la jefa de la Oficina de Servicios Climáticos de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), Catalina Cortés, dieron a conocer el reporte hidrológico de las principales cuencas del país, con especial atención en las regiones más afectadas por la escasez hídrica, como Coquimbo.

La ministra López informó: “Tenemos buenas noticias, porque en general las lluvias y nieve acumuladas durante el otoño e invierno pasado nos han dado un alivio respecto a la disponibilidad de agua a nivel país en comparación al año pasado. Sin embargo, seguimos bajo los promedios históricos y enfrentamos una sequía que ya se extiende por 15 años consecutivos”. Esta mejora relativa en la situación hídrica, aunque aún lejos de los niveles óptimos, representa un respiro para varias zonas afectadas, incluida Coquimbo.

En cuanto a la región de Coquimbo, las autoridades recalcaron que, aunque las reservas de agua siguen siendo críticas, especialmente en las cuencas de los ríos Elqui y Limarí, los esfuerzos por mantener el suministro de agua han dado resultados positivos. La cuenca del río Elqui no presentó acumulación nival, y los embalses, en general, se encuentran por debajo del 50% de su capacidad. De los ocho embalses monitoreados en la región, solo se ha acumulado el 16% de agua, equivalente a 206 millones de m³ de un total de 1.325 millones de m³ disponibles.

Pese a este escenario desafiante, la ministra destacó que “Estamos desarrollando un conjunto de medidas y obras en esta región, que incluyen las cuencas de Elqui, Choapa y Limarí. Durante el último trimestre de este año, vamos a licitar la construcción de una planta desaladora concesionada para Coquimbo-La Serena, además de estudiar la ubicación y trazado para una desaladora de emergencia para Limarí”. Estas iniciativas buscan garantizar el suministro de agua en el mediano y largo plazo, aportando soluciones estructurales a la crisis hídrica de la zona.

El pronóstico climático para los próximos meses, presentado por Catalina Cortés, jefa de la Oficina de Servicios Climáticos de la DMC, también reveló la posibilidad de un trimestre más seco de lo normal en la región. “Las proyecciones sugieren que el trimestre de primavera, septiembre, octubre y noviembre, tendrá mayores probabilidades de presentar una condición de precipitación por debajo de lo normal en gran parte del territorio nacional”, afirmó Cortés. Esto incluye a la Región de Coquimbo, que se prevé tendrá lluvias escasas en comparación con los niveles históricos.

A pesar de este pronóstico, el trabajo conjunto entre las autoridades, los municipios y las empresas está enfocado en fomentar un uso responsable del agua, especialmente durante los meses de verano. En palabras de la ministra López, “Es vital que las empresas, los municipios y la ciudadanía adopten un consumo responsable y eficiente del agua, con un énfasis especial en la Región de Coquimbo, que es la más afectada”.

Este enfoque, que combina medidas de emergencia con estrategias a largo plazo, busca no solo mitigar los efectos de la sequía, sino también sentar las bases para una gestión sostenible del recurso hídrico en una región vital para el país en términos agrícolas y turísticos.

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