Este martes diferentes grupos ambientalistas se manifestaron por la construcción de un muro de contención por parte del Ministerio de Obras Públicas (MOP) en el humedal El culebrón de Coquimbo, que serviría como contención para marejadas y tsunamis en el lugar, pero que, según los ambientalistas, generaría principalmente un daño a la biodiversidad, a las napas subterráneas y también una afectación económica a los algueros del lugar, que trabajan en el sector de playa Changa.
El muro de contención, que llevó meses de construcción, se hizo sin consultas técnicas, científicas y sin participación ciudadana, según lo que indicaron los dirigentes, algo que fue negado por el MOP, quienes aseguran que hubo consulta ciudadana. Pese a ello, se presentó una reclamación al Ministerio de Medio Ambiente, la que fue acogida y respaldada por el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA), ya que el humedal es un lugar de nidificación de aves autóctonas y endémicas.
Consultado al respecto, el ambientalista Marcelo Olivares, miembro de la Red de Observación y Conservación de Aves Silvestres de la Región de Coquimbo, indicó que es un desastre ambiental. “Ha sido calificado como el desastre ambiental del año 2020 en la región de Coquimbo. Este proyecto pensando, diseñado y generado por consultores que no son de la región, por la Dirección General del Ministerio de Obras Públicas que tiene sede en Santiago y no en la región”, señaló Olivares.
En cuanto a la finalidad del muro, para el experto ambientalista, Adrián Chevalier, el muro no genera ninguna protección ante tsunamis y provocará la destrucción de la plata Changa. “Va a alterar el flujo de agua, va a cursar que si pasa un tsunami, este muro no representa ninguna barrera frente al oleaje de un tsunami”, afirmó Chevalier.
El reclamo también lo realizaron algunos vecinos de Coquimbo, como Alex Cortes, quien hizo hincapié en la necesidad que las autoridades escuchen el clamor de la comunidad. “Quiero llamar a las autoridades a asumir su rol, Chile se ha manifestado en la calle y pareciera que las autoridades no quieren escuchar las demandas del pueblo, también quiero invitar a los vecinos a indignarse y a manifestarse, porque esto no puede seguir ocurriendo”.
Por otra parte, desde el Ministerio de Obras Publicas en tanto ratificaron que las obras cuentan con la autorización de los entes correspondientes, como el Servicio de Evaluación Ambiental. Así lo aclaró el Seremi de Obras Públicas, Pedro Rojas, quien indicó que como medida van a iniciar los trabajos desde el borde costero hacia el humedal, dejando el último tramo sujeto a modificaciones, de acuerdo a diversas reuniones en conjunto con las organizaciones medioambientales.
Lo cierto es que la construcción continúa en el lugar, pese a que existe un Plan Nacional de Protección de Humedales, lanzado el 2018 por este mismo gobierno.
Puedes ver la entrevista desde el minuto 48.}