Los trabajadores de una funeraria de Shanghái, China, devolvieron una bolsa para cadáveres a un hogar de ancianos después de notar que la persona todavía estaba viva.
El gobierno local confirmó el accidente y afirmó que cuatro funcionarios fueron despedidos, mientras que se le revocó la licencia a un médico. Varios otros trabajadores están siendo investigados por el caso.
Las autoridades agregaron que el paciente había sido trasladado al hospital y se encontraba en condición estable.
“El hogar de ancianos es un desastre. Enviaron a una persona viva en un coche fúnebre y dijeron que estaba muerto. El personal de la funeraria dijo que todavía se estaba moviendo (…) Es irresponsable, realmente irresponsable”, se oye decir a la persona que grabó el video.
El incidente provocó una ira generalizada en las redes sociales chinas, como Weibo, donde los usuarios cuestionaron la confiabilidad del sistema durante la cuarentena que ya cumple más de un mes en la ciudad.