Desde hace más de 3 meses que se encuentra detenida la joven estudiante de enfermería de la Universidad de La Serena, Akina Nakamura, quien es acusada por el porte de bombas molotov y que actualmente se encuentra en prisión preventiva mientras dure la investigación del caso.
Su nombre se ha convertido en una constante a la hora de solicitar justicia y libertad en las marchas desarrolladas en la capital regional,por parte de los diferentes actores sociales, donde exigen al menos que la joven pueda esperar el proceso en un arresto domiciliario y no privada de libertad en el centro penitenciario de Huachalalume.
Conversamos con el abogado defensor, Carlos Silva para conocer más detalles del proceso actual que se desarrolla en contra la joven de 25 años. “Lo que se le esta imputando a Akina es un delito del articulo 10 de ley de control de armas que corresponde la posesión y la tenencia de artefactos explosivos de fabricación casera de menor poder expansivo, de hecho la norma califica que estos artefactos deben tener al menos una pequeña cantidad de combustible para ser juzgada, situación que es parte de la teoría que estamos presentando no ocurre en el caso de la joven” sostuvo el abogado.
En dos ocasiones se ha solicitado el cambio de las medidas cautelares. La primera fue el 5 de febrero al Juzgado de Garantía y luego el 13 de febrero ante la Corte de Apelaciones y en ambas oportunidades la solicitud fue denegada, donde el argumento para mantener la prisión preventiva se basa en que ” la policía ha hecho afirmaciones de que vio a Akina portando seis botellas vacías con mechas y sus respectivas tapas, la cual serian pruebas necesarias para acusar a la joven” indicó Carlos Silva.
Ahora el abogado anunció que recurrirán nuevamente al Tribunal de Garantía argumentando nuevos antecedentes como las pruebas de hidrocarburo que demuestran que en las manos de Akina no existe ningún tipo de restos de combustibles, ya sea bencina o acelerante que puedan demostrar el uso de estos artefactos por lo cual “no hay ninguna prueba hoy día para determinar que las afirmaciones de la policía de la manipulación de Akina de sus manos directa a esas botellas o de bombas molotov existe”
Finalmente la investigación fue cerrada por solicitud de la defensa de la joven indicó el abogado, con el fin de realizar pruebas particulares periciales técnicas para determinar la inocencia de Akina ya que actualmente no confían en las pericias que pueda realizar la policía, para volver a solicitar la apertura de un nuevo proceso en la fiscalia.